La violencia en una relación de pareja se refiere a toda acción u omisión que daña tanto física, emocional o sexualmente a alguno de los miembros. Es importante señalar que aunque la mayoría cree que los agresores son siempre hombres, también hay muchas mujeres que agreden a su pareja. Usualmente asociamos la violencia en el noviazgo con insultos, agresiones físicas o sexules, pero es importante tener en cuenta que hay algunos hechos o actitudes que tu pareja puede tener y que sin lugar a dudas son incorrectos. Por ejemplo: - Revisa tus pertenencias, celular o correo electrónico para saberlo todo.
- Presiona para que hagas dietas o ejercicio.
- Te hace sentir menos al compararte con otras personas.
- Si le preguntas o le pides alguna explicación, se exalta, culpa a los demás por estar en contra de su relación, pero jamás responde a su conducta.
- Controla todo lo que haces y exige explicaciones. Quiere saber con lujo de detalles a dónde vas, dónde estuviste, con quiénes te encontraste o a quiénes vas a ver. Y para comprobar lo que dices te llama constantemente a ti, a tus amigos o familia.
- Te ha tocado, besado o acariciado sin consentimiento.
- Tiende a hacer escándalos en público o en privado por cualquier causa.
- Vigila, critica o pretende que cambies tu manera de vestir, de peinarte, de maquillarte (para el caso de la mujer), de hablar o de comportarte.
- Limita las relaciones que tienes con tu familia, amigos, vecinos, compañeros de escuela o trabajo.
- Tu pareja decide cuándo se verán, a qué hora y dónde. Todo de acuerdo a su conveniencia.
- Te presiona para tener relaciones sexuales, sin importarle tus convicciones.
Para identificar si tu pareja se está aprovechando de ti, es importante saber que hay etapas dentro de la violencia en pareja. Etapa 1: Tu pareja se tensa constantemente, hasta llegar al punto de que te insulta y reprocha. Etapa 2: Te agrede física, sexual o emocionalmente sin poder controlarse. Etapa 3: Busca la reconciliación, dice arrepentirse, promete que va a cambiar; te llena de obsequios y se muestra muy complaciente. Cuando este ciclo sucede más de una vez en la relación, se trata un caso de violencia que debe ser detenido y atendido, y por ende, tu pareja no está comprometido contigo y realmente no te ama. Además, estos comportamientos no se limitan a vivir un infierno en el noviazgo, las consecuencias son mayores, hasta llegar a padecer: Aislamiento, trastornos en la alimentación y de sueño; fracaso escolar o deficiente rendimiento laboral; embarazos no deseados; depresión y suicidio. En el noviazgo la violencia es muy sutil y va creciendo poco a poco con el tiempo, sin que te des cuenta, por lo que es muy importante estar alerta, y si tu pareja tiene alguna de las actitudes antes mencionadas, debes de tener mucho cuidado. No importa qué tanto quieras a tu novio o novia, antes debes de amarte a ti mismo y saber que alguien que realmente se preocupa por ti y te ama, nunca hará algo que te dañe, al contrario, siempre buscara tu bienestar. Recuerda que siempre estás a tiempo, haz un alto y entiende lo que está pasando, toma las decisiones necesarias para alejarte, e incluso busca ayuda de un profesional especializado y/o denuncia lo que te ocurre. Tomado de yoinfluyo.com
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario